Hace unos días vi en el LinkedIn de un amigue (Javier Souto Grela) una publicación sobre una empresa que en Japón se dedica al cultivo hidropónico vertical de Lechuga confinadas bajo luz LED. Realmente el cultivo, en este caso de lechuga, sometida durante todo su ciclo de cultivo, que no de vida, a luz LED, y llevado a cabo en granjas verticales, no es algo nuevo, máxime teniendo en cuenta la escasez de superficie de cultivo de la que adolecen en Japón.

La técnica lleva utilizándose en el Imperio del Sol Naciente ya desde hace unos cuantos años, con unos resultados de producción espectaculares. Sin embargo, lo que en un primer momento parece la apuesta innovadora de la empresa, el uso de LEDs, queda en segundo plano cuando realmente vemos el otro punto en el que se apoya la producción de lechuga hidroponía confinada, que no es más que el cultivo controlado (nivel de nutrientes, CO2, temperatura, humedad, agua…) y prácticamente estéril!!!!! y que se ha visto impulsado por la preocupación creciente del uso de productos químicos en los alimentos.